Carisma y espiritualidad MMB
«Como Mercedarias Misioneras de Bérriz nos sentimos llamadas hoy a dejarnos hacer por el Dios de Jesús. Un Dios que nos empuja a ir abrazando nuestra fragilidad como Instituto y también la del mundo y del planeta… para compartir nuestro tesoro: La Buena Noticia de Jesús.
Un Dios que sigue confiando en nosotras la Misión de acoger, acompañar, amar con ternura y cuidar la vida, especialmente de las personas más vulnerables.
Deseamos responder caminando juntas: buscando, discerniendo, pensando nuestras presencias misioneras desde una visión global» (Doc. Capítulo General XVII).
Nuestro Compromiso
Nuestro carisma misionero liberador nos impulsa, en el hoy de la humanidad, a contribuir a que este mundo sea de verdad casa común, mesa compartida, hogar para todas las personas, especialmente para los más vulnerables y para todas las criaturas.
Por eso queremos seguir sosteniendo nuestro compromiso con:
- El cuidado de la Casa Común.
- Con las personas más empobrecidas.
- Promoviendo la hospitalidad y la cultura del Encuentro.
- La infancia y juventud.
- La Justicia, la Paz y la Integridad de la Creación.
Sostener nuestro compromiso con las personas más empobrecidas y frágiles de nuestro mundo:
- Queremos seguir caminando junto a ellos y ellas, acompañando sus vidas y sus luchas, implicándonos en las causas que provocan la exclusión, violencia, y asumiendo estilos de vida más sostenibles que promuevan una mayor justicia y solidaridad.
- De una manera especial queremos seguir apoyando los procesos de liberación de las mujeres de nuestros pueblos.
Comprometernos con las personas migrantes y refugiadas…
Apostar por unas relaciones no violentas a todos los niveles
Vivir el cuidado mutuo en las relaciones cotidianas,
Capacitarnos para vivir la interculturalidad